lunes, mayo 07, 2007

Escapes de la Realidad

En la brillante película de Guillermo del Toro, El Laberinto del Fauno; Ofelia, una niña de 13 años crea un mundo imaginario para escapar de la cruda realidad de la Guerra Civil Española. En Fight Club de Chuck Palahniuk, el protagonista principal de la historia crea un alter ego (Tyler Durden) para romper con su pequeña vida cómoda y consumista (no consumista asquerosa) y llevar a cabo un proyecto anárquico contra los poderes financieros. En la plancha del zócalo de la Ciudad de México, Andrés Manuel López Obrador ha creado un héroe en un mundo imaginario para poder escapar de una realidad cruel y dolorosa para él: su rotundo fracaso en la elección del 2 de julio.

Tal y como si fuera una historia de ficción, AMLO ha creado una mitología para escapar de la realidad. El universo mágico del peje tiene su génesis en El Fraude, llevado a cabo por los demonios malvados y explotadores: Los Señores del Dinero. Éstos quieren perpetuar su explotación y abuso sobre los pobres que encuentran en AMLO, su presidente legítimo, su única salvación y redención.

Es tan impactante lo ocurrido con AMLO que la única forma de recuperar un poco de capacidad de asombro sería imaginándonos a Segolene Royal acusar a Sarkozy de fraude, acampar en Campos Eliseos y proclamarse presidenta legítima. Apostaría a que tendría más de un apóstol dentro de las miles de personas que chocaron contra la policía en la plaza de la Bastilla y en otras ciudades francesas al enterarse de la derrota de la candidata de izquierda.

El movimiento lopezobradorista, incapaz de la autocrítica y el diálogo, basado en una mitología fantástica, en ideas que requieren aceptarse sin razonamiento alguno y en la existencia de un ser indestructible, está transformándose en lo que podría ser la peor pesadilla para la izquierda: una religión. Solo trate de discutir El Fraude con un lopezobradorista; no encontrará una defensa más fanática y agresiva. Serrano Limón contra el aborto es juego de niños en comparación.

Tras ser acusado de querer formar un nuevo partido político a expensas del PRD, AMLO ha tratado de dejar en claro que su intención es formar la organización social y política más importante del país. Esta organización no tiene estatutos, solo una carta con un mandamiento en donde la gente que firma se compromete a ser movilizada. Es una especie de religión marchista que promete la salvación a través de la movilización.

La democracia mexicana esta siendo amenazada por fuerzas que escapan la razón y que se alimentan del resentimiento y el rencor. Esta en todos nosotros rechazar los fanatismos y los ídolos que se promulguen salvadores y redentores sin importar que sean de derecha o izquierda.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Primer mensaje AMLOve!!

Unknown dijo...

Excelente post Pop Galore, creo que después lo llevare al sendero del mesias, si no te importa.

En efecto los seguidores del Peje NUNCA DISCUTEN lo que él dice, el que se atreve es tachado de traidor


El peje jamás se equivoca, mas que partido politico, pareciera una secta religiosa.

Anónimo dijo...

Guau; tus comentarios son certeros y atinados. También aprovecho para mostrar mi avatar de señor del dinero como homenaje a Abel Quezada